Chute de ego

Conversación con mi hija Leire, de 32 meses:

Yo: Leire, ¿me quieres?
Leire: sí
Yo: ¿mucho o poco?
Leire: te quiero mucho, amatxu
Yo:  ¿Y por qué me quieres mucho?
Leire: (sin titubear) Porque eres amatxu

Lógica aplastante que no se me había pasado por la cabeza.

Con afirmaciones de tamaña rotundidad hoy voy a dormir más que tranquila. Parece que por el momento mi papel de amatxu no lo ejerzo tan mal...

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi experiencia con los minerales. El desenlace.

II Encuentro de Bloggers de Getxo

A las ocho de la tarde