El cambio

"Te cambia la vida, ¿no?" Gran frase que he escuchado esta tarde en conversación telefónica con una vieja amiga, que fue a Madrid a encontrarse a sí misma y encontró trabajo, marido y ahora, un bebé en camino. Y claro, ahora es cuando empieza a preguntarse esas cosas...

Sí amiga, la maternidad te cambia la vida. No sé si a mejor o a peor, es todo tan relativo... Si lo ceñimos exclusivamente a los miedos que me comentas, uséase, que según te han dicho el primer mes es espantosodelamuerte (siento decepcionarte, cada mes tiene su cosilla), que hasta los seis meses no vais a poder viajar (¿einnnnn?), etc., etc., etc., pues hombre, sí, para qué te voy a engañar, a mejor a mejor, pues como que no. No es plato de gusto dormir poco, comer de aquella manera, pasear como Fernando Alonso porque si no se despierta y la enana (en mi caso) berrea como si estuviera poseída, tener que comer en un restaurante a turnos para sujetarla, porque no aguanta en el cochecito, estar preocupadísima porque le ha salido un granito, enseñar la teta a medio universo (y muchas veces para que no coma...).

Pero si miramos otras muchas cosas, hay un noséqué que te toca muy dentro y que, por ejemplo, hace que esté viviendo con angustia verdadera (ansia viva que diría José Mota) el más que inminente retorno al trabajo. No sé si tiene sentido enumerarlas: sus primeros balbuceos (menudas conversaciones), las risotadas que se echa conmigo cuando le canto "Pintxo Pintxo", el descubrimiento de sus manitas (cómo las junta, jajaja), su mirada profunda y llena de interrogantes mientras va cayendo dormida, cómo se acurruca en mi regazo cuando quiere dormir, cómo se calma en mis brazos cuando llora desconsolada, sus pucheritos... Vamos, que no es plan de enumerarlas, que podría seguir. Sin más me quedo con el hecho de que esté ahí, eso es lo que hace que tu vida sea mejor. Porque ves todo lo demás de forma muy diferente.

En fin amiga, con esto quiero decirte que el supermegaviajeestupendodelamuerte se queda corto comparado con mis tardes de paseo con la peque. Así que, relájate y disfruta, que pasa volando...

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi experiencia con los minerales. El desenlace.

II Encuentro de Bloggers de Getxo

A las ocho de la tarde